La mejor forma de incrementar los salarios en México

 

 

Enrique de la Madrid

 

Los mexicanos merecemos mucho mejores salarios, somos de los países que más horas trabaja a la semana, somos bien luchones, pero necesitamos que esas horas sean mucho mejor pagadas.

No obstante, los salarios no subirán mucho si la economía no crece. Un ejemplo muy ilustrativo es que, aunque el actual gobierno subió 60% el salario mínimo, el salario de los trabajadores de la economía formal subió en promedio únicamente 0.5 por ciento.

Es decir, por cada 100 pesos que ganaban en 2018, su salario aumentó 50 centavos, un incremento casi imperceptible. Esto al descontar el efecto del aumento de precios.

Celebro el incremento del salario mínimo, pero la realidad siempre termina por imponerse: si la economía no crece, no habrá mejores salarios.

Debemos reconocer que nuestra economía lleva muchos años creciendo de forma insuficiente, pero además muy desigual, mucho antes de que iniciara este gobierno. El problema es que mientras antes estábamos estancados, por primera vez vamos en franco retroceso.

El ingreso por persona cayó 5% en los últimos 5 años, en tanto que en China creció 20% durante el mismo periodo, y eso que la pandemia empezó allá y que tuvieron cuarentenas muy estrictas.

México ha sido de las economías con peor desempeño del mundo y de Latinoamérica, pero la buena noticia es que está muy claro lo que tenemos que hacer para revertir esta situación.

Para empezar, tenemos que cambiar el rumbo, porque en los últimos 5 años el gobierno nos endeudó como nunca, gastó dinero como nunca y nuestra economía, como nunca, ahora sí fue de las de peor desempeño.

Con un incremento tan gigante del gasto gubernamental es indignante que sólo hayan salido 5 millones de la pobreza, con toda esa deuda y gasto debieron salir, por lo menos, otros 15 millones.

Están tirando nuestro dinero, no sólo en aeropuertos sin vuelos y refinerías que no refinan, también se incrementó agresivamente el gasto en medicinas y estamos en la peor escasez de medicinas que hayamos visto.

 

¿Dónde está todo ese dinero?

Sin embargo, tampoco debemos de regresar a lo que hicimos en gobiernos anteriores, pues no tuvimos los resultados que necesitamos.

Lo más importante para mejorar el salario de los mexicanos y detonar nuestro potencial es aumentar la productividad, es decir, que produzcamos mucho más por cada hora trabajada.

Imaginemos a un panadero que produce 30 deliciosas conchas por día, ahora imaginemos que obtiene un horno más grande y logra producir 60 conchas, después, le enseñan una nueva técnica y ahora produce 90 conchas al día.

Es increíble cómo, a pesar de ahora tener internet, computadoras, mejores hornos y muchas otras nuevas tecnologías, la productividad en México ha caído diez por ciento desde 1990.

Hay dos principales factores detrás del desplome de nuestra productividad: la falta de cumplimiento de la ley y la falta de competencia económica.

Regresando al ejemplo de nuestro panadero, imaginemos que un segundo panadero se da cuenta que le puede robar 20 conchas a nuestro panadero y que no pasa nada.

Entonces, ese segundo panadero deja de trabajar y mejor se pone a robar conchas y revenderlas, así no tiene que levantarse temprano ni esforzarse tanto.

Además, ningún banco le presta dinero a nuestro panadero para comprar el horno más grande, porque los bancos tienen miedo de que no les paguen el préstamo y nadie los defienda.

En vez de que entre los dos panaderos hagan más de 100 deliciosas conchas, sólo producen 30, empiezan a escasear en la colonia y, por ello, suben de precio.

El hecho de que no se imponga el respeto a la ley, provoca mucho crimen, encarece los préstamos y las inversiones, los negocios se quedan chiquitos y los salarios se estancan.

La falta de competencia tiene un efecto similar. León, Guanajuato, es famoso por ser La capital mundial del calzado, hay tantos vendedores que la gente pasea buscando los mejores precios entre tantas opciones. Lo mismo sucede con las guitarras en Paracho, Michoacán.

Seguramente en tu ciudad hay un área con varias imprentas o comerciantes de plantas. Al estar tan juntos compiten por ver quién tiene los precios más bajos y los mejores productos; los más llamativos, los de mejor calidad. La gente sabe que con tanta competencia ahí encontrará lo que quiere.

En México hay muchos obstáculos a los negocios, lo que provoca que sólo las grandes empresas crezcan y se perjudica la competencia. Algunos productos los pagamos al doble de su precio por la falta de competencia.

Si hay solo una carnicería, puede subir los precios y no tendrás alternativa cuando necesites carne, más que pagar sus altos precios.

Necesitamos que las pequeñas empresas en México crezcan y haya muchísimos negocios peleándose porque tú seas su empleado, ofreciendo cada vez mayor salario para que te quedes.

Es vital que en México impongamos el respeto a la Ley, que reduzcamos los obstáculos al florecimiento de los negocios, que les demos a los trabajadores mucho mejores herramientas y buena capacitación para que todos y todas cobremos mucho mejor.

Un mucho mejor México es posible y yo seguiré trabajando para construirlo juntos, con el Frente Amplio por México, porque mi verdadera vocación es servirte, porque me importa mucho que tu familia esté mejor y porque sólo lo lograremos si trabajamos en equipo.

El legado de la 4T

 

 

El principal beneficio que deja como legado el gobierno de la 4T es que unió a los mexicanos en su contra pero unidos. Antes, los problemas más importantes de México nos separaban en ideologías y partidos y, por supuesto que los partidos y las ideologías son diferentes, pero la situación a que ha llevado al país la llamada 4T nos une a los mexicanos para buscar la solución a los problemas que no solo están sin resolver, sino que se han agravado.
Cabe decir que la acción política de los ciudadanos en nuestro país se ejerce mediante los partidos, que ofrece cada uno espacios ideológicos y plataformas políticas para que los ciudadanos representen a sus electores. También son institutos que permiten al ciudadano conocer e incidir en las decisiones sobre el uso que se hace de los recursos públicos. Corresponde a los ciudadanos esta interacción.
Actuar en alianza los principales partidos ha permitido conocer algo de los procesos internos de los principales institutos políticos para consolidar esa alianza.
Acción Nacional es un partido muy formal, de democracia con economía social y de mercado, que permite alojar a capas empresariales, ciertas tendencias del clero e incluso de la ultra derecha mexicana, que tiene derecho a existir e interactuar con sus propuestas para beneficio de una nación tan plural como es nuestro alegre México.
El PRI ha sido el partido hegemónico que heredó la revolución mexicana. Un liberalismo de democracia social que construyó muchas de las instituciones del México actual pero que se volvió obeso y empezó a cometer torpezas con tal de acceder al poder, que dejó de usar para consolidar la revolución y comenzó a saquear en varias administraciones, unas más y otras también. Salvo honrosas excepciones. Eso hizo que por unos cuantos pagaran todos.
El PRD consolida la diversa pluralidad de partidos que buscaban democratizar la política y socializar la riqueza. Partidos herederos del antiguo Partido Comunista y los diversos extremos que fueron evolucionando hasta consolidarse en este partido.
Los tres partidos tienen condiciones de acceso para los ciudadanos que deseen afiliarse y hoy están en etapa de afiliación, lo que permite a los ciudadanos interesados en participar en el partido con que son afines sus ideas.
Y ahora el ciudadano sabe que puede encontrar cabida en el partido que coincida con sus ideales, que es la única vía para tener los representantes públicos que se desea tener y exigir que cumplan sus ofrecimientos.

El primer paso es la apertura de los partidos, el siguiente paso lo debemos dar los ciudadanos al participar junto con los partidos para acceder a un mejor gobierno.

¿Y los aspirantes?

 

 

Javier Pulido Biosca

Este pasado jueves 10 de agosto, los aspirantes a la presidencia de la república por parte del Frente Amplio Opositor, presentaron su visión y las posibilidades que ven para rescatar a México, a la vez que hicieron patente su capacidad de ofrecer algo interesante a los ciudadanos.

Enrique De la Madrid abrió con un fuerte discurso anti Peje, marcando con claridad que los mexicanos ya no toleramos la violencia, los pagos de piso, los crímenes y la inseguridad.

Beatriz Paredes por su parte explicó la preponderancia de la mujer en la política, afirmando que en esto hay un “salto Cualitativo”, dejando ver su sólida formación en las diversas teorías sociales y su conocimiento del marxismo, real, teorético, diferente de lo que quieren mostrar los nuevos libros de texto gratuitos. A Beatriz le interesó enfatizar la necesidad ya sentida por Luis Donaldo Colosio en 1994 de transformar el sistema político mexicano.

Santiago Creel enfatizó con muy buenos discursos la necesidad, sencilla, de que se respete la Constitución. Lo que es una solución para todas las dificultades que padece actualmente México.

Xóchitl Gálvez, quien tiene un grupo fuerte de simpatizantes que la ven como una aspirante muy popular. Agradable y disruptiva, repitió los esquemas de propuestas que ya ha venido proponiendo desde semanas antes, cuando el Peje forzó a que ella respondiera con cosas inteligentes, que se resumen en conservar los programas sociales y se adicionen. Sí destacó algo que se ha venido trabajando por el Frente en tener un gobierno de Coalición, lo que permite realmente un cambio, que todos aplaudieron.

El discurso de Xóchitl se sintió reiterativo, muy mesurado y provocó pocas reacciones del público, pero el atino en llamar al PRD, que puso en pausa la relación con el Frente debido a una situación que no les gustó. Pero al ser llamado y al enfatizar la necesidad de un gobierno de Coalición, la reacción de los demás aspirantes fue muy favorable.

Beatriz aclaró que no basta con ser popular, carismático, sino hay que tener proyectos que permitan gobernar a un país tan complejo y diverso. Xóchitl pensó que era una clara alusión a ella, lo que le permitió a Beatriz decir que ella criticaba a Fox o a Peña Nieto, ambos con mucho carisma y cuyos gobiernos dejaron mucho que hacer y, sobre todo, no hicieron una transformación a la manera como se hace el gobierno.

Sí, al limarse las asperezas entre ambas aspirantes, se logró cerrar el evento en el acuerdo de que hay que lograr un México justo, que mire al futuro, que cultive sus relaciones con el resto de los países del mundo y que permita que se desarrollen empresas. En esto sí se ve que la fuerza moral y política que tiene el Frente Amplio por México. Vemos más hacia el futuro.