¡Pobre Veracruz!

 

 

Erasmo de Acá

Según la doctrina del derecho, el delincuente puede realizar una conducta reprochable por la ley de dos maneras: Acción por Comisión: el delincuente realiza una acción penada por ley. Acción por Omisión: el delincuente permite que el delito se cometa sin participar en la acción. En consecuencia, el estado al asumir una conducta omisa, pues no combate el delito, es delincuente por omisión, cómplice pues. 

 

Resulta bastante preocupante para la sociedad que libremente se consienta la realización de delitos, el estado cuenta con todo tipo de herramientas para prevenir, perseguir y sancionar las conductas delictivas de algunos miembros de la sociedad, que buscan a través del delito, la satisfacción de sus necesidades o propósitos, mediante los caminos contrarios a las reglas de convivencia armónica.

 

Es lamentable la inseguridad que viven las personas que tienen la necesidad de transitar por las carreteras de nuestro país. Por citar un punto rojo en el mapa, el tramo conocido como cumbres de maltrata, señalamientos entre otros de asaltos masivos, homicidios, robo de vehículos, etc.,  fenómenos que están viviendo los particulares y el transporte de carga en sus diversas modalidades, muchos de los cuales tienen que pagar cuotas a la delincuencia para poder transitar por los caminos nacionales, a tal grado que las compañías aseguradoras están retirándose del mercado de aseguramiento de carga por carretera, esto no es un asunto pequeño, es de lesa gravedad, que afecta a todos los mexicanos, no es posible que el gobernador de Veracruz califique los asaltos en Cumbres de Maltrata como "hechos aislados", afirmando que aparte de un trágico intento de asalto que afectó a la banda musical Fuerza Regida en días pasados y en el que perdió la vida un elemento de seguridad, no se han registrado más eventos, esto hace suponer la carencia de conocimientos o información que es del dominio público, bastaría con platicar con cualesquier habitante de las poblaciones aledañas como Rio Blanco, Orizaba, Ciudad Mendoza o Córdoba por citar algunas, para que se dé una idea clara del peligroso fenómeno que existe en esa región del suelo veracruzano, en donde bandas de asaltantes de caminos se dedican al comercio de las mercaderías robadas en menor y gran escala, en colusión con delincuentes de la entidad Poblana, para mejor comprensión del término colusión, este se define como el “convenio o contrato hecho entre dos o más personas en forma clandestina, con el objeto de defraudar o perjudicar a alguien”, ese alguien somos, los que todos los días nos levantamos para sacar adelante a este país, mediante el trabajo y el esfuerzo personal lícito, pero nos enfrentamos a una parasitosis de Estado, que para su supervivencia y desarrollo dependen del trabajo y esfuerzo de nosotros.

 

Cinco años va a cumplir este gobierno de Cuitláhuac García, que a la par del ejecutivo Federal echan la culpa de los problemas al pasado, y no asumen sus propias responsabilidades y encomiendas.

 

Qué podemos decir los ciudadanos de a pie, que vivimos la falta oportunidades, la falta de asistencia social, de medicinas e instalaciones exprofeso con profesionales que cuiden de la salud a los ciudadanos con problemas cardiacos, de diabetes o cáncer por citar algunos. La baja calidad de la educación, y por el sometimiento a la sociedad en su tranquilidad, en el cierre de tantos negocios y en la mentira que quieren que asumamos como verdad, un estado fallido que no cumplen con los propósitos mínimos, formado por funcionarios elegidos democráticamente que se comprometieron cumplir y propiciar un cambio verdadero, contrario a este propósito nos hundimos aun más en el fango, este modelo de Estado no es requerido para transitar al futuro, se requieren ciudadanos comprometidos, que tengan preparación y conocimiento para administrar, verdaderos políticos, no demagogos. Pobre Veracruz. Aun así, México sigue de pie.