viernes, 27 de octubre de 2023

Acapulco es el Waterloo de Morena


 

Javier Pulido Biosca

Del mismo modo como el Imperio Español decía tener una Armada invencible hasta que el Almirante Nelson, con embarcaciones ligeras y rápidas logró vencer a la Armada Española de manera definitiva. La naturaleza venció la soberbia de Morena.

La prepotencia, el latrocinio, la falta de previsión y el desinterés por los pobladores, no importa su clase social, han caracterizado las políticas públicas del partido que de manera infausta ocupa el poder en México.

Comenzaron por apoderarse del dinero de fideicomisos clave para el auxilio en caso de desastres naturales. Fue muy criticado pero ese recurso les sirvió para los espectaculares de las diversas campañas políticas, que son su prioridad ante un escenario de rechazo a las políticas que despojaron a muchos de sus apoyos: cerraron las guarderías para madres trabajadoras; también cerraron las escuelas primarias de tiempo completo, condenando al desempleo a las madres trabajadoras.

Después impusieron el gobierno de las diversas entidades, siendo en la mayoría de los casos apoyados por la delincuencia organizada, a la que los gobernadores y el gobierno federal les permiten hacer impunemente el cobro de piso a los empresarios y el cobro de impuestos ilícitos a los productores de aguacate, limón y diversas maderas y productos del campo.

 

El gobierno es claro que está en otras prioridades, que son las electorales, sobre todo cuando es consciente que la ciudadanía les rechaza.

Ya habían declarado su poder las fuerzas armadas de la delincuencia, equipadas con armamento de alto poder que le han decomisado al propio Ejército Mexicano. Estaba el momento crucial cuando inventó el mandamás una batalla perdida contra el Poder Judicial Federal. Se trataba de una venganza contra de este poder de la Unión al suprimirle los recursos de sus fideicomisos y fondos creados para complementar las prestaciones a los trabajadores de este poder independiente.

Caso perdido que ha generado un gran descrédito entre la clase trabajadora. Una vergüenza vista a nivel nacional y contemplada desde los medios masivos del extranjero.

Y entonces… con los recursos gastados en carteles, pintas, espectaculares y pago a medios sumisos, se les olvida que hay un sistema de Conagua donde se hace un pronóstico del tiempo y se difunde cada 3 horas los posibles cambios.

En su mundo electoral, que es el que realmente les preocupa, hay una crisis que atender porque sus candidatos, tanto a la presidencia como a las gubernaturas, son pésimos, personas que los pobladores les saben muchas de sus marrullerías.

Con ese olvido, se les olvido que un fuerte huracán se formaba frente a las costas de Michoacán y Guerrero y cuya velocidad aumentó 24 horas antes de tocar tierra. Las preocupaciones del gobierno no le permitieron cumplir con su función, avisar y desalojar Acapulco antes de que el meteoro climático lo impidiera.

Lo demás ya lo sabemos: miles de millones de dólares perdidos en edificios, casas, hoteles, carreteras afectados y, lo peor la pérdida de vidas humanas, que hasta ahora, 72 horas después del huracán, no se ha hecho un censo adecuado: ineptitud notoria por todas partes.

Se confirma que quienes gobiernan México sólo buscan apoderarse de todas las riquezas y tienen una gran incapacidad para servir a su pueblo. Después de esto nadie, mentalmente sano, cree en los engaños de la 4T. 

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